Afecciones

ESTRABISMO
ESTRABISMO
Síntomas: Dolor de cabeza, visión borrosa, fatiga ocular, problemas de visión en la noche
Diagnóstico: Examen de ojos con dilatación de las pupilas
Tratamiento: Anteojos con receta médica, lentes de contacto, cirugía

El estrabismo consiste en la alteración en la alineación de los ojos al enfocar, lo que hace que los dos ojos no apunten en la misma dirección al mismo tiempo. Un ojo puede mirar hacia delante, mientras que el otro ojo se desvía a una dirección diferente.

Podemos clasificar el estrabismo según la dirección en la que se desplaza el ojo desviado. Así hablaremos de estrabismo convergente si el ojo se desvía hacia adentro, de estrabismo divergente si el ojo se desvía hacia afuera y de estrabismo vertical si el ojo se desvía hacia arriba o hacia abajo. El tipo más frecuente es el estrabismo convergente que, en ocasiones, puede asociarse con alteraciones verticales.

La principal alteración visual que puede provocar el estrabismo en los niños es la ambliopía conocida también como el ojo vago o perezoso. Al existir estrabismo, el ojo desviado no realiza la fijación sobre los objetos con la zona central de la retina (fóvea), por tanto, no desarrolla toda su potencia visual. Si este defecto no se corrige durante la llamada época de plasticidad cerebral (hasta los 8 años aproximadamente) la disminución de visión en el ojo desviado será permanente e irreversible. La ambliopía u ojo vago es la causa más frecuente de pérdida visual unilateral en niños y jóvenes.

Las causas del estrabismo pueden ser desórdenes en el sistema nervioso, como una alteración o lesión de los músculos del ojo, errores refractivos de visión sin corregir, factor hereditario, infecciones, tumores, sufrimiento fetal, factores emocionales o traumatismos. En edad adulta, el estrabismo puede ser resultado de una enfermedad, cataratas, golpe o trauma. Existen varias maneras de tratar el estrabismo del adulto, siendo la cirugía la más común.

El estrabismo y sus repercusiones pueden ser tratadas con:

1. Anteojos o lentes de contacto: prescritos para mejorar la capacidad de enfoque y ayudar a problemas de agudeza visual.
2. Parches o medicamentos en niños: un ojo que no está alineado de manera adecuada puede no madurar visualmente. Si no se corrige, la pérdida permanente de la visión (ambliopía) puede ocurrir. El parche o la gota sobre el ojo bueno, obliga a usar el ojo afectado, promoviendo el desarrollo visual.
3. Inyección Toxina Botulínica: actúa de forma local mediante el bloqueo de la liberación de acetilcolina, lo que se traduce en parálisis muscular temporal. El efecto final es una denervación química temporal en la unión neuromuscular sin producir ninguna lesión física en las estructuras nerviosas.
4. Cirugía: los ojos pueden ser alineados con una intervención quirúrgica.